09 agosto 2024
La población americana mira con cierta inquietud a su economía. Lo ocurrido el pasado 5 de agosto, con una tremenda bajada del mercado por la publicación de un informe que no era optimista con el mercado laboral del país, fue la última incidencia de un periodo que está siendo especialmente complicado.
Los altos tipos de interés regulados por la Reserva Federal para luchar contra la inflación, y su negativa a bajarlos, ha tenido en vilo al país durante bastante tiempo. No hay que olvidar que en un contexto así es habitual que la economía se contraiga, situación de la que Estados Unidos ha escapado por el momento. Aun así, el hecho de ver que no llega la reducción de tasas, mientras que, en otras zonas del mundo como en Europa, ya se ha producido, genera ciertas reticencias en el pueblo americano.
En medio de todo esto, el país se aproxima a unas elecciones presidenciales. La eterna pugna entre el Partido Demócrata y el Republicano tendrá un nuevo capítulo en otoño. Joe Biden, actual presidente, se retiró de la carrera para reeditar su mandato, y será Kamala Harris la que intente retener el poder. Como rival tendrá a Donald Trump, que busca volver a la Casa Blanca cuatro años más tarde.
Muchas personas se preguntan qué efectos podría tener la elección de cualquiera de los dos candidatos en la economía. Para poder hacer una predicción, no hay nada mejor que mirar a la historia. Los ojos hay que ponerlos sobre cómo se comportó el DJIA Index (Índice Down Jones), referencia en los mercados de Estados Unidos, las últimas veces que el Partido Demócrata o el Republicano tocaron poder. Esto ocurrió en 2016 con Donald Trump, y en 2020 con Joe Biden.
Victoria del Partido Republicano
En 2016, contra todo pronóstico, Donald Trump superó a Hilary Clinton y se hizo con la presidencia de los Estados Unidos. El famoso empresario recuperaba la Casa Blanca para un Partido Republicano que se había visto superado en las dos elecciones anteriores por Barack Obama. La controvertida figura del magnate hizo que los mercados estuviesen en una situación de incertidumbre en los días previos a las comicios, ya que no sabía que esperarse de sus políticas tras las declaraciones que había hecho en campaña.
Sin embargo, su victoria, confirmada el 8 de noviembre de 2016, fue bien recibida. El Down Jones sufrió un importante repunte, dado que los inversores consideraron su elección como muy favorable. Basaban esa opinión en que el empresario llevaría a cabo ajustes proclives a los negocios, como una bajada de impuestos o una desregulación del mercado laboral.
Esa situación positiva no fue flor de un día, ya que se mantuvo durante gran parte del mandato de Trump. Las jornadas posteriores a que fuese elegido, el DJIA Index tuvo ganancias de 250 puntos. A lo largo de los años que Trump estuvo en la presidencia, este índice alcanzó récords históricos, viéndose muy favorecido de medidas como la reforma fiscal del año 2017, que bajó notablemente los impuestos al tejido empresarial.
Victoria del Partido Demócrata
En 2020, Joe Biden consiguió desbancar a Donald Trump y convertirse en el nuevo presidente de los Estados Unidos. Únicamente cuatro años después de la marcha de Obama, los demócratas recuperaban el poder. Su elección estuvo plagada de polémica, ya que el candidato del Partido Republicano se negó a aceptar los resultados, habló de fraude electoral, y se vivieron días muy complicados. De hecho, un grupo de personas intentó tomar el Capitolio por la fuerza.
Todo ello llegó en un contexto muy difícil para la economía, ya que el mundo se encontraba sumido en la pandemia provocada por el Covid 19. Los meses previos a las elecciones, los mercados miraban de forma escéptica a la figura de Joe Biden, entendiendo que su llegada podría suponer un aumento de impuestos y un enfoque económico mucho más regulador.
Cuando se confirmó su victoria, el 7 de noviembre de 2020, el Down Jones mostró una mezcla de reacciones. Sin embargo, no tardó en estabilizarse y comenzar su subida. Los inversores entendieron que el mandato de Biden podría ser positivo, dado que era un político más previsible que Trump y que estaría dispuesto a llevar a cabo planes de estímulo económico para luchar contra lo que había provocado la pandemia.
El DJIA Index no abandonó esa buena tendencia en los días posteriores a la elección. De hecho, llegó a alcanzar niveles récord. Ayudó mucho que en ese periodo se anunció la aparición de una vacuna contra el COVID 19, y que esta comenzaría a suministrarse a la población en los meses posteriores, pudiendo poner fin a la situación de pandemia.
Durante el primer año de presidencia de Biden, el Down Jones siguió llegando a números absolutamente históricos. La recuperación económica, motivada también por las políticas de estímulo fiscal y monetario, permitió que los inversores fuesen mucho más optimistas.
