Algo tan sencillo de decir tiene grandes dificultades en su consecución y a la vez es, sin duda, la prioridad de cualquier gobernante. Pero hay diferentes maneras de llegar al mismo fin, y una importante diferencia entre la creación de puestos de trabajo y la generación de empleo. Lo primero es mucho más sencillo y tiene resultados a corto plazo, se pueden crear puestos de trabajo de manera inmediata, realizar contratos temporales que solucionen momentáneamente un problema, pero el problema persiste. La segunda, la de la generación de empleo, es la más compleja, pero es también la más útil, la que da solución a los problemas, la más difícil de entender pero también la que marca las diferencias en la forma de hacer política, la generación de empleo es sentar las bases de un modelo productivo que ha de asentarse en el tiempo, preparar a los ciudadanos para ser los que sustenten ese modelo productivo, ofrecer todas las herramientas para que los ciudadanos tengan un puesto de trabajo que les permita desarrollarse a lo largo de los años. Todo esto pasa por un análisis real de la situación laboral, de la formación de los trabajadores, de los nuevos yacimientos de empleo y de la estabilidad de los mismos, en Extremadura no sólo hemos tenido un desempleo cíclico, causado por la crisis económicas, nuestra región ha sido víctima de un desempleo estructural, causado especialmente, porque aquellas personas que durante años han tenido la responsabilidad de gobierno no han buscado el bienestar de los extremeños, si no el rédito electoral, la rentabilidad rápida, que lejos de crear soluciones alargan los problemas.
Hoy podemos decir que en mayo de 2011, llegó la fuerza del cambio, llegó la manera de hacer política que piensa en hoy pero también en mañana. La creación de puestos de trabajo es necesaria, pero siempre trabajando por la generación de empleo.
El cambio de la estructura productiva que está empezando a dar sus frutos con la generación de suficientes puestos de trabajo, para una población económicamente activa.
El Gobierno de Monago ha conseguido en tres años y medio no sólo reducir la listas del paro, se han diseñado programas de formación específico para los extremeños, programas de empleo directos para los que más lo necesitan, se han conjugado de manera exquisita las dos maneras de crear empleo, la de creación de puestos de trabajo para necesidades puntuales y la de la generación de empleo que asegura el bienestar.
La estrategia de industrialización, la apuesta por la investigación y el desarrollo, la mejora de las infraestructuras, el turismo, la internacionalización y la modernización directa de nuestro campo... Cada una de las políticas desarrolladas por el Gobierno de José Antonio Monago tienen un único objetivo los extremeños y una firma propia, la de un Gobierno que ha decidido potenciar el crecimiento económico y la generación de empleo, no sólo para hoy también para mañana.
FERNANDO PIZARRO GARCÍA-POLO
