29 febrero 2024
Ep.
El movimiento ciudadano Defensa del Parque del Príncipe de Cáceres ha afeado al PSOE que defienda la ampliación del aparcamiento en superficie situado en este entorno, ya que se trata de un proyecto "ilegal" al llevarse a cabo en una zona verde, y ejecutar las obras supondría convertir un espacio protegido por la ley en una aparcamiento.
Así, esta asociación cree que "este aparcamiento disuasorio no puede llevarse a cabo dónde y cómo se pretende por su ilegalidad y deficiente planificación", por lo que apoyan el anuncio hecho por el alcalde cacereño, Rafael Mateos, de rescindir el contrato "siempre que no se perdieran los fondos" de la Unión Europea que se van a destina a este fin.
Respecto al concejal socialista Andrés Licerán, que ha manifestado que "la única razón que hay detrás de la decisión de Mateos es la negativa a que haya aparcamientos gratuitos en el centro de la ciudad para hacer que los cacereños tengan que pagar por aparcar en parking privados", los vecinos defienden que "no es cuestión de preferir aparcamientos privados antes que los gratuitos", sino de atenerse a la normativa vigente y a los requisitos que establecen las actuaciones financiables por los fondos Next Generation.
El movimiento ciudadano, que ya ha registrado más de 1.100 firmas de oposición al proyecto, ha insistido en que "las obras se planificaron mal en su origen, incumpliendo de forma flagrante numerosos requisitos que establecen los fondos europeos, y su ejecución supondría la supresión de una zona verde por la vía de los hechos mediante una obra pública".
Defensa del Parque advirtió al equipo de Gobierno local que el informe de compatibilidad urbanística recogido en el expediente validaba la construcción de un aparcamiento en un área calificada como Zona Verde en el Plan General Municipal (PGM), cuando el uso de aparcamiento no se encuentra permitido.
Las leyes urbanísticas españolas han defendido la intangibilidad de las zonas verdes y los tribunales han forjado una cláusula que los juristas denominan standstill, o principio de no regresión, recuerda el movimiento en nota de prensa, en la que recalca que para mantener la proporcionalidad y calidad de las zonas verdes existentes (estándares urbanísticos) no se permite la supresión o modificación sustancial de estos espacios.
