01 marzo 2021
La opción de comprar un vehículo de segunda mano llevaba aumentando el interés de la población en los últimos años, pero la incidencia del coronavirus lo ha potenciado aún más. La desconfianza en el plano económico y la buena calidad de la oferta hace que se mantenga el dato de comercialización de 1,7 vehículos de segunda mano por cada uno de nueva matriculación
Después de un 2020 catastrófico para las ventas en el sector de la automoción, se espera que el 2021 traiga una recuperación que, desgraciadamente, será mucho menos activa de lo que hubiera sido deseable, al menos en lo que se refiere a automóviles nuevos. El motivo de esta lenta mejoría se debe a la entrada en vigor de la nueva normativa WLTP, es decir, un aumento del impuesto de matriculación nada menos que del 50 % de los coches que actualmente están en venta. Esto va a suponer una subida de entre 500 y 1000 euros más para cada vehículo.
Esta es una excusa más para que siga creciendo el número de compradores de coches de ocasion. El nuevo impuesto incide aún más en una realidad habitual en este sector, y es que la compra de un coche usado supone un importante ahorro en el precio. Sin embargo, no es la única ventaja.
Ventajas de adquirir un vehículo de ocasión
Además del mencionado precio, hay que considerar, entre los beneficios al adquirir este tipo de vehículos, el buen estado de revisión que presentan, sobre todo si se adquieren en concesionarios referentes en el mercado, como es cochesdeocasion.es. El análisis y diagnóstico por el que pasan para después entrar en el taller y dejarlo perfecto garantiza su perfecto funcionamiento.
Así mismo, otra de las ventajas que conlleva adquirir coches de segunda mano es que las entregas son inmediatas, al estar en el stock del concesionario el cliente solo tendrá que tramitar la compra y llevárselo el mismo día. Esta rapidez es prácticamente imposible si se trata de coches nuevos, ya que se deben cumplir los plazos de fabricación, los tramites de matriculación, los traslados desde sus lugares de producción…, pudiendo atrasarse la entrega incluso meses.
Como ya se dijo al principio, la nueva normativa sobre las matriculaciones supone un duro golpe para la venta de coches nuevos, un incremento que no afecta a los coches de segunda mano que tienen, además, otras ventajas con respecto al pago de los impuestos. Por ejemplo, cuando se adquiere un coche de ocasión, los gravámenes son menores, pues su titular solo se tendrá que hacer cargo del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP), que varía desde el 4 hasta el 8% según la Comunidad Autónoma donde se lleve a cabo la transacción. En el caso de que se trate de un coche nuevo, se está obligado a pagar hasta el 21 % del importe total en concepto de IVA.
La compra siempre en un concesionario
La clave para poder aprovechar todas las ventajas de comprar un coche de segunda mano es hacerlo en un concesionario, nada de particulares. Con esta práctica, el comprador se asegura de que los vehículos están completamente revisados, cuentan con garantía y los respalda un servicio postventa de calidad.
Comprando en estos lugares, también se asegura el apoyo y la cobertura suficiente si aparece una avería. En estos casos, será reparada en el propio taller en el mínimo espacio de tiempo posible, sin complicaciones ni enfrentamientos.
Por otra parte, otro punto muy interesante será la eficiencia en la realización de todas las gestiones y trámites necesarios por parte del equipo del concesionario, sin que el comprador tenga que preocuparse por nada. La pérdida de tiempo de las visitas a tráfico o a la gestoría (y su coste) quedarán a cargo del concesionario.
Diferentes categorías para los conches usados
Para completar la información que se ofrece en este artículo, cabe señalar que se pueden dar tres casos diferentes cuando un profesional se refiere a un coche de segunda mano. La división se lleva a cabo en función de su antigüedad y el número de kilómetros realizados por el automóvil.
De este modo, existen los llamados coches kilómetro 0, que son aquellos vehículos que han sido matriculados a nombre del concesionario o de la marca del coche. Su precio se reduce ya que están matriculados, y como condición ineludible no deben pasar los 200 kilómetros. Son vehículos que se han utilizado para acciones comerciales o de exposición, por lo que están prácticamente nuevos, contando con toda la garantía habitual de la casa.
Por otro lado, también se localizan los coches seminuevos, los cuales no pueden haber superado los 50.000 kilómetros de recorrido o los 24 meses de antigüedad. Su procedencia es más variada, ya que pueden haber cumplido funciones con el personal del concesionario, que haya servido de prueba en estos locales, o que hayan sido usados por empresas de alquiler o por particulares con el modo de multiopción.
Por último, los coches de ocasión, cuya antigüedad se localiza entre los dos y los cinco años, con una media de 25.000 kilómetros, si son de motores diésel, y hasta 15.000 kilómetros al año si son de gasolina. Su procedencia puede ser de renting o clientes que ofrecieron su coche como parte del pago por uno nuevo.
