18 febrero 2020 | Publicado : 12:46 (18/02/2020) | Actualizado: 23:23 (18/02/2020)
La Unión de Consumidores de Extremadura (UCE) ha realizado una serie de recomendaciones con motivo de la próxima celebración del Carnaval, como apostar por disfraces, complementos y maquillajes fabricados en la Unión Europea que cumplan con la normativa de etiquetado y seguridad.
En concreto, UCE ha recordado que los disfraces deben cumplir con la legislación en materia de seguridad, por lo que el incumplimiento de esta normativa, que puede "poner en riesgo la salud" de los más pequeños, ha provocado la retirada de 21 referencias de disfraces en España en 2019.
De este modo, esta organización ha alertado de los "incumplimientos más frecuentes" en el etiquetado como la ausencia de advertencias en castellano, la falta del marcado CE que certifica que el disfraz ha sido fabricado en la Unión Europea o el símbolo que indica que el artículo no debe ser utilizado por menores de 36 meses.
No obstante, a su entender, "más graves aún son los incumplimientos de las normas de seguridad", como los cordones presentes en los disfraces que han provocado "accidentes muy serios" en toda la Unión Europea, algo que ha motivado que se dicten varias normas que prohíben en las prendas dirigidas a menores de siete años la existencia de cuerdas corredizas, cordones funcionales o decorativos en la zona de la cabeza y el cuello.
Además, según ha informado la UCE en una nota de prensa, también es frecuente que algunos accesorios como las pelucas o las máscaras "no cumplan los requisitos" sobre inflamabilidad exigidos por la normativa europea, lo que hace que se incendien con mayor facilidad de la debida.
RECOMENDACIONES
Por ello, ante este panorama es "muy importante" que los padres sean responsables de los disfraces que se adquieren, y sigan las recomendaciones y consejos que propone la UCE como mirar el etiquetado, el nombre y marca del producto, la razón social y dirección del fabricante o las instrucciones de uso.
Así, si el disfraz tiene máscara, o se compra alguna suelta, hay que comprobar que existen suficientes orificios de ventilación y que su tamaño es apropiado para quien vaya a usarla.
En caso de comprar un disfraz para un niño pequeño, hay que tener en cuenta que no haya piezas pequeñas o que se puedan romper con facilidad, así como bordes cortantes u objetos puntiagudos, algo que también hay que tener en cuenta con los cosméticos que deben contener en su etiquetado el nombre del producto, el fabricante, la fecha mínima de caducidad, el número de lote y sus componentes.
Respecto al tema textil, si el disfraz contiene complementos como tridentes, escobas, pistolas o sombreros, hay que comprobar que "no tienen" partes punzantes ni piezas pequeñas que puedan desprenderse con facilidad y ser tragadas; tampoco deben ser demasiado largos ya que los niños se pueden lastimar fácilmente con estos accesorios si se tropiezan o caen.
Por otro lado, las pinturas deben ser "no tóxicas e hipoalergénicas" o, al menos, probarla en una zona de la mano para observar si causa alguna reacción alérgica.
En cuanto a las lentillas decorativas, deben venderse en establecimientos que dispongan de profesional cualificado y verificar que incluyen un etiquetado adecuado en nuestro idioma.
DISFRACES SEXISTAS
Por otra parte, la UCE también ha advertido sobre los tradicionales catálogos de distintos establecimientos que distinguen entre disfraces masculinos y femeninos, algo que con el paso del tiempo ha cambiado por un código de colores.
De tal manera, a las chicas se les suele identificar con tonos rosas de princesas, bellezas y labores del hogar, mientras que a los chicos se le atribuye el color azul de profesiones de acción o superhéroes.
Sin embargo, "cada vez más padres y organismos reivindican la igualdad de ambos sexos", algo de lo que son conscientes los establecimientos jugueteros por lo que dicha distinción ha desaparecido en muchos catálogos, aunque la realidad en el establecimiento es "bien distinta".
Así, mientras que en el catálogo se puede ver a una niña disfrazada de bombera o policía nacional, en la ilustración del envoltorio de esos disfraces en la tienda aparece un niño, estando reservadas las fotografías de niñas al etiquetado de los disfraces de 'Hada-Princesa', 'Princesa del Hielo' y demás variantes.
Por ello, la UCE ha pedido favorecer la igualdad evitando la distinción por colores, respetando las decisiones de los más pequeños y educándoles para que escojan el disfraz que quieren "sin dejarse condicionar por los roles establecidos en la sociedad", concluye.
