Parte del encanto que tiene festejar el Jarramplas está quizás en su origen desconocido y disputado. Hay quienes lo vinculan con criaturas de la mitología griega, otros con el lobo que “jarramplaba” con las ovejas, algunos piensan que representa el linchamiento de un ladrón de ganado o incluso tradiciones de los indios de Américas importadas tras el descubrimiento. ¿O quizás … se trate del demonio?. Sea como sea, la vinculación con la celebración de San Sebastián parece ser lo único sostenible de momento.
De cualquier forma,...
Ver noticia completa