Centro Nacional de Investigación en Almacenamiento Energético, referente en Extremadura

Naciones Unidas define el Cambio Climático como una emergencia mundial que va más allá de las fronteras nacionales. Se trata de un problema que exige soluciones coordinadas entre todos los países. Nuestro planeta nos está exigiendo que lo cuidemos. Un tema que está en boca de todos y con unos objetivos a los que se aspira llegar. Con toda esta incertidumbre llega a Extremadura el pionero Centro Nacional de Investigación en Almacenamiento Energético (CNIAE). 

Consejería de Economía, Ciencia y Agenda Digital a lo alto del Conjunto Arquitectónico Morería // Crédito: regiondigital.com

A lo alto de una parcela de 12.000 m2 que, hasta principios de la década de los años noventa del siglo pasado, ocupara el barrio humilde de Morerías y que es hoy uno de los yacimientos arqueológicos urbanos más grandes de la península, al menos hasta la apertura al público de los restos hallados en la parcela del Cuartel de Artillería. Estamos hablando del Conjunto Arqueológico de Morería, pero concretamente lo que se sitúa encima de ella, la Consejería de Economía, Ciencia y Agenda Digital. 

El secretario general de Ciencia, Tecnología e Innovación, Jesús Alonso Sánchez, nos espera en su despacho con una sonrisa y muchas ganas de contar el gran proyecto que tiene entre manos, el CNIAE. 

“El CNIAE nace con el objetivo de resolver lo que son los retos científicos y tecnológicos que contribuyan de manera decisiva a lo que es la gestionabilidad de la producción de las energías verdes, para aportar flexibilidad y garantizar el suministro de esta energía que es almacenada en función de lo que es la demanda y de una perspectiva amplia, incluyendo la producción y los usos, el trasporte y los sectores industriales”, expone Jesús Alonso.

Otro de los objetivos del CNIAE es que este almacenamiento energético de energías verdes contribuya a lo que es la sostenibilidad y la independencia energética con las necesitades presentes y futuras, y, en tercer lugar, que contribuya a la descarbonización tanto de los sistemas industriales como del planeta. “Tenemos un problema con la producción del CO2, y queremos de alguna manera facilitar ese desarrollo de energías renovables para no tener tanta dependencia de combustibles fósiles. Avanzaremos con el objetivo europeo que es que Europa sea climáticamente neutra en 2050”, detalla el secretario. 

“El Centro de Nacional de Investigación en Almacenamiento Energético es una iniciativa que tiene el Gobierno de España con la Junta de Extremadura y que está financiado con fondos europeos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, aproximadamente un 75% y con fondos FEDER y fondos propios del Estado y la propia Comunidad Autónoma”, explica el secretario.

Jesús Alonso Sánchez trabajando en su despacho / / Crédito: Amanda González

Para lograr estos objetivos, el centro se enfocará en tres grandes áreas de actuación conectadas entre sí. Una primera de investigación y desarrollo en todos los niveles del almacenamiento de la energía, desde la químico-física de los materiales hasta el escalado y aplicaciones industriales. Una segunda de colaboración estrecha con el sector industrial y una última que se basará en la contratación de buenos profesionales, “realizaremos asesoramiento y formación tanto de investigadores como profesionales en lo que es el almacenamiento de las energías”.  

Como explica Jesús Alonso, el centro iniciará tres áreas de investigación centradas en el almacenamiento eléctrico, electroquímico y térmico. En la línea del sector eléctrico el CNIAE utilizara materiales avanzados para mejorar las prestaciones de las baterías actuales. “Tendremos nuevas aplicaciones que proporcionen funcionalidad a los operadores en red”. También realizarán estudios de degradación de baterías para mejorar sus ciclos y tiempo de vida para el desarrollo de productos fiables y rentables, así como su posible reciclaje. 

“Otro aspecto que se tendrá en cuenta son los materiales y aplicaciones nanotecnológicas para incrementar, de este modo la densidad energética, aislamiento, resistencia a altas temperaturas y reducción de costes de los supercondensadores, así como sus aplicaciones en los mercados”. 

Dentro de la línea de investigación de Hidrógeno y Power to X el centro se centrará en materiales y procesos electroquímicos para la producción, almacenamiento y transporte de hidrógeno verde y la conversión a combustibles y productos químicos mediante la captación e integración de CO2 con el hidrógeno. 

En cuanto a la energía térmica: “Nos centraremos en el diseño y modificación de los materiales de cambio de fase, en la mejora de sus propiedades termo-físicas, incluyendo la transferencia de calor, encapsulación y estabilización y la integración de sistemas de almacenamiento térmico y almacenamiento térmico frío en sistemas de refrigeración por adsorción”. Las tres grandes líneas se harán pruebas de componentes a gran escala (MW). 

Pero todo este gran proyecto no quieren hacerlo en soledad. “Queremos una colaboración público-privada con el sector industrial, y para ello queremos que las empresas participen en los órganos de gestión como en la Junta Asesora Industrial para poder constituir laboratorios mixtos públicos-privados”. Además, se constituirán consorcios ad-hoc para el dearrollo de tecnologías concretas, se participará en programas de innovación abierta para la creación y desarrollo de Empresas de Base Tecnológica y en especial, se desarrollarán programas específicos de formación con la creación de un máster de almacenamiento energético con la Universidad de Extremadura y cursos formativos. 

El conjunto arquitectónico del nuevo centro estará situado en la ciudad de Cáceres en un terreno de 11 hectáreas cedidas por la Diputación de Cáceres en la finca el Cuartillo entre la Universidad de Extremadura y el Centro de Cirugía de Mínima Invasión. Este conjunto, además, estará formado por tres edificios. Un primer edificio principal de unos 10.000 metros cuadrados distribuidos en tres plantas donde realizarán su trabajo entre 100 y 150 investigadores y personal administrativo y estará constituido por la administración del centro, los departamentos y laboratorio de investigación, despachos, aularios y unidades de servicios y apoyo a la investigación. 

Rodeado por una línea amarilla, la zona donde se localizará el CNIAE // Crédito: Consejería de Economía, Ciencia y Agenda Digital

“Existirá un segundo edificio que tendrá la utilizar de planta piloto con Infraestructura Científica y Técnica, será un edificio muy versátil de unos 2.000 metros cuadrados que albergará los grandes equipamientos e instalaciones para el escalado industrial”, señala Jesús Alonso. 

El tercer edificio contará de 1.200 metros cuadrados de incubadora tecnológica para el desarrollo de Empresas de baso Tecnológica que contará con laboratorio de 50 metros cuadrados cada uno además de almacenes técnicos, oficinas nidos, salas de reuniones y zona de administración. 

Se prevé destinar más de 30 millones de euros para el equipamiento científico y plantas piloto en las que se podrán disfrutar de laboratorios específicos de espectroscopía, caracterización y síntesis de materiales, electrónica de potencia, baterías y supercondensadores, almacenamiento electroquímico, Power to X, almacenamiento térmico y computación. 

“Actualmente estamos en el proceso de selección y contratación de los/las directores de departamento y planta piloto y la constitución de las oficinas de contratación y esperamos que este megaproyecto pueda ser el germen de un polo tecnológico regional en torno al almacenamiento energético”, explica el secretario. 

Polo Tecnológico de Almacenamiento Energético // Crédito: Consejería de Economía, Ciencia y Agenda Digital

El proceso ya está en marcha y las investigaciones comenzarán a realizarse en 2022 dentro de varias ubicaciones dentro de la Universidad, pero lo que es la finalización de toda la infraestructura se prevé para diciembre de 2023.