11 noviembre 2021 | Publicado : 10:11 (11/11/2021) | Actualizado: 13:02 (11/11/2021)
El museo Thyssen-Bornemisza ha puesto sus ojos en el MUBA, concretamente en la edición de la colección Rescate nº13 que lleva por título “Zurbarán en los archivos extremeños” y en el que cuyo autor, Luis Garraín, cronista de la ciudad de Llerena y académico correspondiente de la Real Academia de Extremadura de las Letras y las Artes, lleva a cabo un exhaustivo repaso por la documentación conservada en distintos archivos de nuestra región relacionados con la vida privada y artística de Francisco de Zurbarán.
El próximo martes 16 de noviembre a las 19:30 horas, en el salón de actos de la institución madrileña, tendrá lugar la presentación del libro con la presencia de Guillermo Solana, director artístico del Museo Thyssen; Luis Garraín como autor de la obra; M.ª Teresa Rodríguez, directora del MUBA y responsable de su edición.
Además, asiste la prestigiosa investigadora francesa Odile Delenda, autora del prólogo del libro y que ya estuvo en Badajoz, con motivo de la presentación de la publicación en el Salón de Plenos de la Diputación el 4 de diciembre de 2019. Especialista en la pintura del Siglo de Oro español y autora del catálogo razonado y crítico de Francisco de Zurbarán publicado por la Wildenstein Institute entre 2009 y 2010, es la mayor conocedora de la obra del pintor fuentecanteño.
Francisco de Zurbarán es uno de los pintores fundamentales del Siglo de Oro español. Extremeño de nacimiento, con desarrollo profesional en Andalucía y en la corte madrileña, América también formó parte de su mercado artístico.
Su mentalidad emprendedora, el funcionamiento de su taller, el sentido práctico del desarrollo de su oficio, sus relaciones familiares y sociales, así como sus primeras y más tardías obras en Extremadura, se nos descubren en esta edición gracias al trabajo de su autor Luis Garraín quien es conocedor, como ningún otro, del desarrollo de la ciudad de Llerena y su ámbito de influencia a lo largo de la historia, ciudad cuyo nombre estará siempre unido al de Francisco de Zurbarán ya que el pintor residió en la localidad bajoextremeña entre 1617 y 1630 y llevó a cabo a lo largo de su carrera diversos encargos en la provincia.
