Tecnología

Junta destina 2,8 millones a ampliar la red de incubadoras tecnológicas de Extremadura

Este proyecto se encuentra incluido en el VII Plan Regional de Investigación, Desarrollo Tecnológico e Innovación de Extremadura

El Consejo de Gobierno ha autorizado la firma de un convenio con la Fundación Fundecyt-Parque Científico y Tecnológico de Extremadura para desarrollar el programa de la Red de Incubadoras Tecnológicas de Extremadura.

La portavoz y Consejera de Cultura, Turismo, Jóvenes y Deportes, Victoria Bazaga, ha señalado que, para este fin, se ha aprobado una partida de 2,8 millones de euros, recalcando que, con esta iniciativa, se trabajará en nuevas incubadoras.

Este proyecto pretende fomentar la creación de empresas de base tecnológica y nuevas 'pymes startup' emergentes con modelos de negocio basados en el desarrollo tecnológico.

De esta forma, se combina una red de espacios especializados de incubación y aceleración de ideas de negocio y empresas de nueva creación, con una cartera de servicios para toda la red que articula el ecosistema en su conjunto, con la finalidad de contribuir a reorientar la creación de empresas en nuevas cadenas de valor, nuevos productos y mercados asociados a los retos globales de la sostenibilidad, la digitalización y la transición energética.

Al respecto, ha recordado espacios ya existentes como la incubadora recientemente inaugurada en Almendralejo que cuenta con tecnología basada en la realidad virtual y aumentada; o la de Mérida, con una planta piloto preindustrial en la que los interesados pueden aprender a deshidratar y envasar alimentos antes de su salida al mercado.

MICROCREDENCIALES UNIVERSITARIAS

Por otro lado, el Ejecutivo regional ha autorizado la concesión directa de una subvención a la Universidad de Extremadura para llevar a cabo el Plan de Desarrollo de Microcredenciales Universitarias, por importe de 1.062.658 euros con cargo a fondos Next Generation EU.

El objetivo de este Plan es la obtención de microcredenciales por parte de estudiantes adultos, ofreciendo "formación especializada a profesionales de entre 25 y 64 años", lo que a su vez se espera que redunde en su participación laboral, el desarrollo de su carrera profesional y la calidad de su empleo, así como la productividad, competitividad e innovación en su lugar de trabajo.

Según Bazaga, una "formación a la carta" que se imparte a propuesta de las propias empresas, asociaciones empresariales, colegios profesionales o centros de empleo de acuerdo con sus necesidades.

A modo de ejemplo, ha expuesto que el Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Agrícolas ha solicitado una formación de monitoreo de parcelas agrícolas mediante imágenes por satélite.

Por tanto, el objetivo es impulsar la recualificación mediante formaciones "breves, flexibles y orientadas a adquirir unas competencias concretas" que son demandadas en el ámbito laboral.

Además, se persigue la modernización y digitalización del sistema educativo para avanzar hacia un modelo personalizado, inclusivo y flexible que se adapte a las necesidades de cada persona, incluyendo al alumnado adulto.

También tiene como finalidad reforzar la formación del profesorado mediante la integración de nuevas técnicas educativas en la escuela basadas en el uso de medios digitales, y garantizar la conectividad de la red universitaria y la adaptación de los programas y sistemas a las nuevas tecnologías, así como el aprendizaje combinado presencial y a distancia.