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SENSIBILIDAD
Durante estas vacaciones de fin de año charlando con unos amigos mientras veíamos la televisión, nos hemos dado cuenta de la importancia de los gestos en política. Se acababa de producir el asesinato de un policía nacional y las imágenes nos mostraban el entierro. Los periodistas que entrevistaban a algunos de los asistentes transmitían los mensajes de dolor, rabia e indignación, no sólo por la muerte de un ser querido sino también por la indiferencia con la que, a su juicio, habían sido tratado por sus superiores No estaba presente ni el ministro del área ni ninguno de sus más altos representantes. Posiblemente se habrían limitado a enviarles un pésame por carta.
Esta historia que a algunos nos puede resultar lejana, sin embargo es el síntoma, por ejemplo, de cómo se hace la política municipal, sobre todo en la mayoría de los pueblos de Extremadura. Se basa en la proximidad, en la cercanía, en el conocimiento y si ahondamos más, en el compartir dolores y alegrías con tus semejantes. En el pararte a preguntar, con nombres y apellidos, por la salud de un familiar, por el trabajo del sobrino, por los estudios de la hija….
En muchas ocasiones queda al margen la gestión de las grandes obras que se puedan realizar a lo largo de la legislatura o al menos quedan enturbiadas por la torpeza de los errores cometidos en detalles como los que comentamos. Si es cierto que siempre se incide en que los ediles, son los cargos públicos más sacrificados, pues están las 24 horas del día en el “tajo”, no lo es menos que son muy valoradas actitudes como pasarte unos minutos por tu trabajo a preguntar cómo estás, a disculparte por no haber venido antes, a ofrecer tu consuelo y acompañamiento…
Para aquellos que ven a la política como algo distante de nuestras vidas, ésta es la prueba de lo contrario. Significa el vínculo entre lo público y lo privado, el enlace entre el individuo y lo colectivo, la suma de las experiencias cotidianas. La sensibilidad.
Cabe destacar que el gesto que hemos analizado hoy es una excepción. Muchos tenemos en nuestra memoria esa mano tendida, esa llamada, ese beso o ese abrazo de la mayoría de nuestros representantes en aquellos momentos tan significativos, por inolvidables, de la vida de los que nos rodean.